A riesgo de caer en el famoso refrán "Todo necio confunde valor y precio", para las grandes empresas que cotizan en bolsa, la evolución del precio de la acción (siempre y cuando no haya existido emisión o o compra de acciones en el período analizado), puede ser una buena aproximación.
Simplificando, si mi empresa vale más que hace un año, como propietario puedo hacer una lectura de crecimiento empresario y patrimonial positiva.
Si además, tengo indicadores comparativos con el mercado en el que actúo, del sector, y del país, mejor.
Uds me dirán: Pero si ya tengo un balance anual que me indica la evolución patrimonial, ¿para qué quiero hacer una valuación?
Es simple: Los balances contables solo toman en cuenta lo pasado, lo sucedido en el ejercicio, y no las perspectivas de negocio futuras. En cambio los mercados, premian o castigan el valor de una acción, considerando también los escenarios futuros de la empresa.
Hasta aquí todo bien, pero ¿qué ocurre con una pyme familiar, o con empresas no cotizantes?
Está claro que no alcanza con la percepción de valor del propietario.
En realidad, hay métodos absolutos, como el flujo de fondos descontado, que considera los proyectos y crecimiento esperado, y hay métodos relativos, como el de múltiplos de EBITDA* o de PER*, que permiten realizar la valuación.
Entonces, ¿Cuánto vale mi pyme familiar?
Es una de las preguntas más comunes y de las más difíciles de contestar en empresas no cotizantes, porque no solo hay varias definiciones aplicables, sino porque la respuesta también depende de la percepción que tengan los accionistas. No "ven" a la empresa de la misma manera los accionistas que además cumplen funciones directivas, y reciben una retribución, frente a otros accionistas que solo reciben dividendos.
Aquí van algunas formas de valuación:
Valor de mercado: Valor de la acción * cantidad de acciones en circulación.
Valor patrimonial: Valuación de los activos menos los pasivos de una organización.
Valor real: Precio que alguien está dispuesto a pagar por mi empresa.
Valor basado en flujos de fondos: Valuación de los flujos de fondos, generados por los negocios presentes y futuros. Es una medida asociada a las capacidades de la organización.
Sea cual fuere el método utilizado (en lo personal, me inclino por este último), lo principal es tener en cuenta que una empresa familiar es, en primer lugar, una empresa.
Y como tal, quienes la lideran necesitan incorporar en la planificación anual, herramientas que contribuyan a la toma de decisiones. La valuación o valorización de la empresa es una de ellas.
Hasta la próxima entrega.
*EBITDA: Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, and Amortization.
*PER: Price and Earnings Ratio.